Tencent, la gigante compañía de la industria del videojuego que posee Riot Games y participa en Epic Games, Ubisoft, Techland y otras firmas destacadas, ha experimentado una caída del 16 % en su valor de mercado, equivalente a aproximadamente 54 mil millones de dólares, marcando su mayor descenso desde 2008. Esta brusca disminución se produjo después de que China, sede de la empresa, anunciara un proyecto de ley destinado a reducir el gasto de la población en microtransacciones de videojuegos. La noticia también afectó a otras compañías asiáticas, como NetEase, que vio caer sus acciones en un 28 %, y Bilibili, una popular red social entre jugadores, con una disminución del 14 %. En total, estas tres empresas sufrieron pérdidas por 80 millones de dólares.
Según informes de Bloomberg, las medidas establecidas por la nueva normativa en China impactarán significativamente en las prácticas de monetización de muchos juegos gratuitos para diversas plataformas. Las empresas de videojuegos en línea deberán establecer límites de gasto, eliminar recompensas por inicio de sesión diario, prohibir las mecánicas gacha y otros sistemas basados en la aleatoriedad, y abstenerse de ofrecer a los creadores de contenido moneda del juego para abrir cajas de botín, adquirir contenido del juego o participar en sistemas gachapon. Además, los reguladores chinos tendrán 60 días para aprobar o retirar un juego en línea después de su lanzamiento si no cumple con estas normas.
Estos cambios, según el analista Mio Kato de Lightstream Research, podrían tener un impacto global en la industria de los juegos para móviles. Kato sugiere que el efecto en China será más significativo de lo previsto en el mercado y predice que estos resultados podrían motivar a otros países a implementar medidas similares contra la adicción a los juegos para móviles y las redes sociales en los próximos años. En sus declaraciones al medio, Kato señala que esto podría marcar «el comienzo del final del modelo de negocio actual de los juegos para móviles«.
La nueva legislación china ha generado una sacudida en la industria del videojuego, con Tencent liderando las pérdidas financieras debido a las restricciones en las microtransacciones. Este desarrollo podría tener repercusiones significativas a nivel mundial, influenciando las prácticas de la industria de los juegos para móviles en el futuro cercano.