Lauren Ramlan del MIT Logra Reproducir Doom en Bacterias Intestinales

En un impresionante avance científico, Lauren Ramlan, una estudiante de doctorado en ingeniería biológica en el MIT, ha logrado reproducir el legendario videojuego Doom utilizando la bacteria intestinal E. coli. Sin embargo, esta hazaña no es para impacientes, ya que llevaría más de 600 años completar el juego.

En un video compartido en su canal de YouTube hace unas semanas, Ramlan explicó cómo utilizó una pantalla única para mostrar una partida de Doom, el icónico juego de 1993 desarrollado por id Software, utilizando una colonia de E. coli. Este proyecto, titulado «1-Bit Pixels Encoded in E. coli for the Display of Interactive Digital Media», o simplemente «Que Doom se vea en una célula», tuvo como objetivo que las células representaran los píxeles iluminados de una pantalla de videojuegos utilizando proteínas fluorescentes activables.

El proceso es asombrosamente lento: lleva aproximadamente 70 minutos mostrar cada imagen y luego 8.3 horas desactivar la fluorescencia en las células para avanzar al siguiente fotograma. Según los cálculos de Ramlan, esto significaría que se necesitarían unos 600 años para ver toda la partida de Doom.

Este proyecto es solo el último ejemplo de la larga historia de Doom como uno de los juegos más versátiles y adaptables. A lo largo de más de una década, ha sido objeto de un desafío para ver quién puede mostrarlo en los lugares más inusuales. Desde jugar en la aplicación Bloc de Notas, hasta dentro de otro Doom 2, utilizando un teléfono antiguo de disco como controlador, e incluso en una máquina cortacésped, Doom ha demostrado su adaptabilidad.

En agosto de 2023, el canal de YouTube The Thought Emporium propuso la idea de utilizar células cerebrales para jugar a Doom, y aunque Ramlan optó por una dirección diferente, el concepto de utilizar células para interactuar con el juego ha sido explorado previamente por Cortical Labs, quienes experimentaron con células cerebrales de ratas para jugar a Pong. Ahora, Ramlan ha llevado esta idea un paso más allá, utilizando bacterias comunes en las heces para mostrar este clásico del mundo de los videojuegos.

Este impresionante logro no solo muestra la creatividad y la innovación en el campo de la ingeniería biológica, sino que también resalta la fascinante capacidad de adaptación de Doom como uno de los juegos más icónicos de todos los tiempos.