MindsEye, la más reciente apuesta del reconocido creador de GTA, Leslie Benzies, ha sido recibida con una avalancha de críticas negativas, al punto de convertirse en el juego peor valorado del año según el portal Metacritic, donde apenas alcanza una puntuación promedio de 43. Aunque era una de las propuestas más esperadas de 2025 por su vinculación con una figura clave del género de mundo abierto, su lanzamiento ha sido considerado un verdadero desastre.
Desde el inicio, MindsEye se ha visto envuelto en polémica. El juego no fue enviado a la prensa para análisis previos, una decisión que suele levantar sospechas en la comunidad, ya que a menudo indica que el producto no está listo para su evaluación. Y, efectivamente, cuando las críticas empezaron a llegar, el panorama fue desolador.
Los fallos técnicos, el mal diseño jugable y la pobre optimización han sido los aspectos más señalados. El título sufre de bajas tasas de fotogramas, una inteligencia artificial torpe, y un mundo abierto vacío que no justifica su existencia.
Opiniones encontradas, pero mayormente negativas

Algunas publicaciones como GamingBolt trataron de encontrarle algo de mérito, calificándolo con un 50, mencionando que “es un buen ejemplo de estilo sin sustancia”. Otras, como The Guardian, reconocieron que a pesar de sus errores, jugarlo no fue del todo desagradable, pero fue difícil recomendarlo seriamente debido a su ejecución deficiente.
Sin embargo, la mayoría de las críticas han sido durísimas. IGN lo describió como un intento fallido de shooter que apenas logra parecer competente por unos minutos, criticando su mundo abierto inútil y misiones mal diseñadas. Push Square lo catalogó como un juego roto y aburrido, con un mapa extenso pero carente de contenido y una historia forzada por una jugabilidad repetitiva.
La crítica más demoledora vino de The Jimquisition, que lo tildó de “vergonzoso”, acusando al juego de ser un “sandbox de cartón” disfrazado de mundo abierto, sin verdadera libertad ni profundidad.
MindsEye se suma a la lista de títulos que, pese a una campaña prometedora, no estaban listos para ver la luz. Su caso recuerda que incluso nombres ilustres de la industria pueden fallar si el producto no se pule a tiempo. La falta de innovación real, los errores técnicos graves y un diseño que parece sacado de otra época lo han condenado a ser uno de los fracasos más sonados del año.
Si bien aún existe la posibilidad de que el juego se redima con futuras actualizaciones, lo cierto es que ya ha dejado una primera impresión muy difícil de revertir.
Con este lanzamiento, queda claro que un nombre famoso no garantiza calidad, y que los jugadores, hoy más que nunca, saben exigir productos que estén a la altura de las expectativas. MindsEye ha demostrado cómo un proyecto ambicioso puede desmoronarse sin una ejecución sólida detrás.